Creo que estarán de acuerdo conmigo en que las técnicas artísticas constituyen un aspecto esencial de la obra de arte, porque los materiales y los procedimientos adecuados para su manipulación y trasformación, hacen posible la existencia física de la obra misma. Nosotros la percibimos sensorialmente a partir de su «cuerpo físico» y material, que sirve de vehículo para la transmisión del sentido. Al decir sentido me refiero tanto a su forma como a su simbolismo, significados, estilos, contextos históricos, sociales, etc. Gracias a los materiales y a las técnicas tenemos obras de arte, aunque envejezcan y se deterioren, y aunque estén pensadas desde el primer momento como creaciones efímeras destinadas a desaparecer.